Opal Card ¿Qué es y como funciona?
Las Opal Card son unas tarjetas de plástico, muy parecidas a las de crédito, que se usan para pagar los viajes en transporte público en Sydney. Se pueden utilizar en toda la red del Transport NSW, es decir, para los trenes, autobuses, ferris públicos y tren ligero. Estas tarjetas son recargables, es decir, deberás "cargarla" con dinero, y de este saldo se irán restando las tarifas de los viajes que vas haciendo. Las tarjetas Opal solo se pueden utilizar en Sydney y sus suburbios; no se pueden usar en otros estados de Australia (la mayoría de las ciudades tienen su propio sistema de billetes, como la tarjeta "myki" de Melbourne).
Tarifas del transporte público
La tarjeta en sí es gratuita, pero el valor mínimo de recarga es de 10 dólares. Es decir, que la primera vez que la compres deberás abonar 10 dólares, y ya estará lista para usar. La tarjeta tiene un tope diario de $16.10 esto significa que si durante un día has gastado esos 16.10$ los viajes que hagas después te saldrán gratis. Además, el tope diario en fin de semana (y festivos) es la mitad, es decir, unos 8 dólares. También tiene un tope semanal de 60 dólares, pero la mayoría de los turistas no llegan a ese tope. La tarifa de acceso a la estación del aeropuerto de Sydney no se incluye en el tope. Existen unas tarjetas Opal para niños de 16 años o menos, con tarifas reducidas (a mitad de precio). Los niños menores de cuatro años viajan gratis. También hay tarjetas de tarifa reducida para personas mayores y estudiantes, pero hay que ser residente en Australia para poder optar a estas tarjetas (por lo que, lamentablemente, no se puede comprar una de estas tarjetas como turista).
Las tarifas pueden ser un poco complicadas de entender al principio, ya que se determinan en función de la distancia recorrida y del tipo de transporte utilizado. Las tarifas del tren oscilan entre 3.61 dólares australianos para un máximo de diez kilómetros y 8.86 dólares australianos para 65 kilómetros o más. Si viajas en las horas de menor demanda (fines de semana, días festivos y fuera de horas punta), se aplica un descuento del 30% sobre la tarifa normal. Además, Opal te recompensa con un descuento de 2$ por los transbordos (deberás coger otro medio de transporte en menos de 60 minutos).
Cómo usar la Opal Card
Antes de acceder al transporte elegido deberás pasar la tarjeta Opal por las máquinas debidamente señalizadas. La mayoría son "contactless", es decir, solamente hay que deslizarla por encima del lector. Hay lectores electrónicos en las puertas de las estaciones de tren y metro, en las puertas de los autobuses, en los andenes de los trenes ligeros y en los muelles de los transbordadores. Al terminar el viaje es imprescindible volver a pasar la tarjeta, de esta forma, el sistema puede calcular la distancia recorrida y cobrarte. Cada vez que pases la tarjeta por el lector podrás ver el saldo restante en una pequeña pantalla. Es muy importante pasar la tarjeta por el lector después del trayecto, de lo contrario, el sistema te cobrará la tarifa máxima.
Si viajas en grupo, cada persona tendrá que utilizar su tarjeta Opal, no se pueden compartir.
Dónde comprar o recargar la Opal Card
Puedes adquirir una tarjeta Opal en los quioscos, oficinas de correos, tiendas de conveniencia y algunos supermercados. Sin embargo, la opción más cómoda y fácil es comprarla en las estaciones o en la terminal del aeropuerto.
Si te has quedado sin saldo, podrás recargarla (añadir dinero) en las estaciones de tren, a través de la aplicación Opal Travel y de las máquinas expendedoras de billetes. También hay máquinas de recarga en algunas estaciones en los muelles.
En las estaciones de tren del aeropuerto, la compra o recarga mínima de Opal es de 35 dólares (que son necesarios para pagar el trayecto hasta la ciudad). En el resto de puntos de venta, el mínimo es de 10$ para los adultos y 5$ para los niños.
¿Puedo recuperar el saldo que me sobra?
No. Solo se puede reembolsar el crédito no utilizado en una cuenta bancaria australiana, por lo que es recomendable ir añadiendo el saldo poco a poco y no meter mucho dinero de golpe (que no sabes si utilizarás). Hay que tener más cuidado al final del viaje, para no dejarse muchos dólares dentro.
Pagar con tarjeta de crédito
También es posible pagar los viajes en transporte público utilizando una tarjeta de débito o crédito. Esta debe ser Visa "contactless" y funciona igual que una Opal: hay que pasarla al entrar y al salir. Sin embargo, tu banco puede cobrarte comisiones por transacciones internacionales en cada operación y no te podrán hacer los descuentos. En algunas estaciones también es posible comprar billetes sencillos, pero hacerse con una tarjeta Opal nada más aterrizar en Sydney (en el aeropuerto o en una tienda cercana) es probablemente la mejor opción para viajar sin estrés.
